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martes, diciembre 3, 2024
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Parejas disparejas, parte 1: ¿La pareja ideal?

—¿Está bien lo que está pasando entre nosotros?

—¿No debería ser así la pareja ideal?

—¿Cómo debería ser y qué nos recomiendas?

Estas son algunas de las muchas preguntas que me hacen las parejas cuando llegan al consultorio.

Existe una gran preocupación por estar haciendo las cosas “bien” y, sobre todo, por cumplir con un ideal.

Aquí es en donde encontramos una trampa. No hay relaciones y parejas ideales, sólo hay parejas reales.

Cuando les pregunto: ¿qué es para ti y cómo es para ti una pareja ideal? Las respuestas están relacionadas con estereotipos, con imperativos morales, con creencias religiosas y,pocas veces, con deseos genuinos por el interés hacia la persona.

No hay parejas ideales, sólo hay parejas reales, reitero.

Querer cubrir un ideal es entrar a una dinámica neurótica de conflicto entre lo que dicen que debemos ser y lo que realmente somos.

Dejamos de ver a la persona tal cual es para encajarla en ese supuesto ideal. Dejamos de ver la relación de pareja como lo que es y queremos encajarla en un modelo que,desafortunadamente, dista mucho de la realidad. Esto nos hace sufrir.

Por lo tanto, empezamos a sacrificarnos en lugar de disfrutar de la relación. Empezamos a luchar por cumplir modelos impuestos y no nos dejamos fluir por la dinámica del contacto y los acuerdos con la pareja.

El problema de la pareja ideal es que nos genera culpas: “Me siento culpable por no cumplir con una expectativa”, o “le echo la culpa a mi pareja por no esforzarse lo suficiente”, en lugar de asumir la responsabilidad de entender, conocer y caminar con la pareja.

—¿Psicólogo, ¿está bien lo que estoy haciendo?

Es una pregunta que constantemente aparece en el consultorio. Lo más importante no es la respuesta que pueda dar, sino acompañar en la reflexión , en el autodescubrimiento de lo que realmente se desea y conviene para uno mismo y para la relación.

Existe una urgente necesidad de encontrar validación respecto de los imperativos morales, ante el “deber ser” necesito que otra persona me valide.

Esto nos lleva a caer en la frase: “deseo ser una mejor persona para ti”. Para mí, la expresión debería ser: “deseo que caminemos juntos, acompañándonos en nuestra evolución”.

Cada persona y cada pareja vive de manera diferente el amor, la atracción y el deseo. Experiencias definitorias de una relación de pareja, mismas que es importante conocer, reflexionar y vivir de manera consciente y responsable.

Pero eso será tema de mi siguiente artículo…

Si es ideal, no es real.

Psic. Raúl Rodríguez / Tel. 985 103 42 63 / @psicraulrodriguez

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